Un buen vino es fundamental para acompañar una paletilla de cordero lechal al horno o cualquier otra manera de preparar el cordero. Cordero y vino siempre han ido de la mano a lo largo de los siglos y en este post te vamos a dar algunas recomendaciones para que elijas los mejores caldos cuando vayas a comer cordero asado.
Por qué es importante el maridaje del vino y el cordero asado
Como manda la tradición, ya desde tiempos de los romanos, un cordero lechal debe asarse lentamente en una bandeja de barro con agua y sal y si se hace en horno de leña mucho mejor. La parte de fuera debe quedar crujiente y la de dentro se debe desprender del hueso sin ningún esfuerzo.
Es importante utilizar un cordero de la máxima calidad, como puede ser un cordero churro segoviano. El que lo ha probado sabe que no es una comida nada pesada y, como acompañamiento, podemos degustar una ensalada y un buen vino tinto.
El vino tinto y las carnes asadas maridan a la perfección, pero no resulta fácil elegir el vino ideal para el tipo de carne que vayamos a comer. La dificultad radica en que los sabores del vino y el cordero deben complementarse y potenciarse mutuamente. Como en la mayoría de las cosas, encontrar el equilibrio es la clave.
La carne de cordero tiene un sabor intenso y el vino tinto también, por tanto el maridaje a priori es bueno, pero entre la amplia variedad de vinos que hay en el mercado, resulta imprescindible elegir el más adecuado al tipo de cordero asado que hemos elegido.
La función principal del vino tinto será suavizar la grasa del cordero y también potenciar su sabor. De ahí que los tintos con mucho cuerpo y bien balanceado permiten resaltar aún más las cualidades de un buen cordero. Vamos a ver los vinos que mejor maridan con el cordero asado.
Opciones de vino tinto para acompañar el cordero lechal asado
Las características de la carne de cordero y su preparación van a influir a la hora de elegir el vino. A continuación te proponemos algunos vinos que funcionan muy bien con el cordero asado, aunque tendrás que probar cuál es el que se asemeja a tus gustos y prioridades.
Vino tempranillo
Como hemos dicho, el vino que acompañe al cordero debe ser potente para quitar la grasa de este plato y este tipo de vino sin duda lo es. La variedad de vinos de crianza, con un mínimo de dos años en barrica de roble, tienen además un aroma que combina a la perfección con el cordero asado.
Los vinos Reserva y Gran Reserva maridan perfectamente si el cordero asado tiene mayor robustez y lleva más ingredientes como hierbas aromáticas, ajo, cebolla, etc. Tienen un grado de alcohol moderado y sabor con matices a frutas maduras que combinan a la perfección con el sabor del cordero asado, a la parrilla o a la brasa.
Vino Ribera de Duero
La textura, los aromas balsámicos y la madera bien integrada del Ribero de Duero maridan perfectamente con la carne suave del lechazo. Tanto el cordero como el vino salen potenciados de esta combinación.
Vino Pinot Noir
Este es un vino más suave pero no le quita ningún protagonismo al cordero. Es ideal para los comensales que no están acostumbrados a tomar vinos fuertes. Son vinos muy elegantes y delicados, con cuerpo más ligero, una acidez notable y un aroma fresco y saludable, ideal para degustar junto al cordero asado.
Vino Syrah
Este vino es ideal para los lechazos de Castilla y León, incluido el segoviano, ya que es un vino muy equilibrado, con cuerpo, estructura, buen aroma y sabor con matices de pimientas que marida perfectamente con este tipo de cordero.
Vino Garnacha
Es un vino con mucho cuerpo y estructura y alto contenido en alcohol, ideal para guisos con ingredientes frutales, por ejemplo el tajín de cordero con ciruelas.
Vino Cabernet Sauvignon
Estos vinos tienen un gran cuerpo y estructura y su inconfundible sabor a moras es un acompañamiento perfecto para el cordero asado. También marida muy bien con el tomate y el pimiento.
Vino Merlot
Este vino con aromas a ciruelas marida muy bien con preparaciones de cordero sencillas, como puede ser a la plancha, aunque también funciona muy bien con el cordero asado.
Para chuletas de cordero, los vinos Malbec son un acompañamiento perfecto, ya que son suaves, dulces y con un toque de vainilla. Si decides preparar un cordero asado con picante, los vinos Rosé son una buena opción. Es un vino rosado con esencia de mora, flores y frambuesa.
Como ves, hay muchos vinos para maridar con el cordero asado y según vayas probando distintos vinos aprenderás a combinar de la mejor manera posible aromas, sabores y texturas y elegirás tus vinos favoritos. Aunque no tiene por qué ser el favorito de otro comensal. En cualquier caso, lo más importante es disponer de un cordero de calidad.
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